Según la legislación europea, solo se pueden conceder patentes sobre ingeniería genética en el ámbito del fitomejoramiento. A pesar de ello, las grandes empresas de semillas han aprovechado lagunas legales y ya han obtenido 200 patentes sobre cultivo tradicional. Los agricultores necesitan acceder al material genético para hacer frente a retos como las plagas, las enfermedades y el cambio climático. El actual sistema de patentes europeo obstaculiza su trabajo.

En 2022, la Oficina Europea de Patentes (OEP) concedió una patente (EP 3380618) para el maíz resistente al frío a la empresa alemana KWS. Desarrollaron el maíz utilizando líneas genéticas existentes conocidas por su tolerancia al frío e identificaron los llamados genes marcadores que pueden utilizarse para el cribado y la selección de los rasgos deseados.

Curiosamente, en la descripción de la patente se mencionan herramientas como CRISPR/ Cas, aunque no se aplicaron. Se trata de una estrategia de uso común que abusa de CRISPR/Cas como herramienta para apropiarse de los recursos genéticos de la diversidad biológica necesarios para el mejoramiento vegetal tradicional.

«Los efectos perjudiciales de estas patentes pueden afectar gravemente a las actividades de los criadores tradicionales, ya que ya no pueden utilizar las variedades existentes para producir variedades de plantas nuevas e incluso mejores»

Este caso demuestra que los efectos perjudiciales de estas patentes pueden afectar gravemente a las actividades de los criadores tradicionales, ya que ya no pueden utilizar las variedades existentes para producir variedades de plantas nuevas e incluso mejores.

El impacto de esta patente también es relevante para los cultivadores de maíz ecológico: las semillas de KWS se utilizan ampliamente para el mejoramiento de variedades de maíz tanto en la agricultura convencional como en la ecológica, lo que significa que el futuro mejoramiento con varias de estas variedades probablemente caerá dentro del alcance de la patente. Por todo ello, NO PATENTS ON SEEDS! presentó una oposición en 2023 y se ha programado una audiencia online para el día 15 de octubre de 2024.

«Las patentes ponen en peligro la diversidad de la cría de plantas y presentan amenazas potenciales para la seguridad alimentaria a largo plazo en Europa»

Las patentes, como las concedidas sobre el maíz, ponen en peligro la diversidad de la cría de plantas y presentan amenazas potenciales para la seguridad alimentaria a largo plazo en Europa. Es fundamental que los 39 Estados miembros de la OEP y la UE intervengan políticamente para garantizar la interpretación y la aplicación precisas de las leyes de patentes europeas con el fin de salvaguardar nuestro patrimonio agrícola y asegurar un futuro sostenible para las generaciones venideras.